Aumenta el uso del Bluetooth para escuchar las conversaciones en el interior de los vehículos

Según expertos del sector de la seguridad informática, el ‘Car Whisperer’ (‘susurrador de coche’) es una técnica cada vez más utilizada por los piratas informáticos, ya que permite obtener el control de un móvil y, a través del sistema ‘manos libres’ del vehículo, utilizar el dispositivo como un micrófono que capta todas las conversaciones –en llamada o no- que se produzcan en el interior.

Los hackers que utilizan este sistema se valen de un sencillo programa que circula de forma gratuita por internet. Su funcionamiento es simple: capta señales de Bluetooth y automáticamente trata de conectarse al dispositivo usando la clave de seguridad (PIN) estándar que viene de fábrica.

Cada modelo y aparato tiene una de estas contraseñas predefinidas, y los piratas que han fabricado este software han tenido acceso a las claves ‘maestras’ de estos dispositivo. En ocasiones, incluso pueden acceder a estos dispositivos aunque se les haya cambiado el PIN de fábrica por otro más sencillo aún (como ‘0000’ o ‘1234’).

Una vez logrado el acceso al teléfono, el atacante puede escuchar en directo –dentro de un radio de acción limitado- el sonido que el micrófono está recogiendo en el interior del coche. Incluso con la opción de grabarlo para escucharlo más tarde, o utilizarlo para fines peores.

Modificación de las claves

Los expertos recomiendan cambiar las claves de acceso de estos dispositivos –que se solicitan cuando se va a ‘emparejar’ dos aparatos a través del Bluetooth- por números seguros y difíciles de intuir.

Este tipo de prácticas no sólo se circunscriben al ámbito de los vehículos. Los auriculares Bluetooth usados en oficinas y en la calle también son susceptibles de ser interferidos.